Atrapamientos.
Contacto con elementos móviles o máquinas en movimiento.
Caídas a distinto nivel.
Trabajos en altura.
Ascenso por escaleras.
Huecos en suelos y paredes.
Quemaduras.
Incendios.
Contacto con superficies calientes.
Explosiones.
Cortes.
Máquinas y herramientas con elementos cortantes o punzantes.
Fatiga mental.
Ritmo de trabajo.
Carga de trabajo, etcétera.
Contacto eléctrico.
Contacto directo e indirecto con máquinas o herramientas accionadas con energía eléctrica